Jugosas piezas de ternera y pollo, cocinadas con esmero para conservar su ternura y sabor intenso, se presentan acompañadas de una fresca ensalada que aporta frescura y contraste, además de una opción a elegir entre arroz esponjoso o patatas doradas. Este plato equilibrado y completo despierta el apetito y ofrece una experiencia reconfortante, perfecta para quienes buscan variedad en cada bocado. Visualmente, la combinación de colores vibrantes de la ensalada y el tono dorado del arroz o patatas hacen que el plato resulte atractivo y apetecible.
