El arroz bomba se cuece lentamente en un sofrito de pimiento verde, rojo y cebolla, que aporta una base dulzona y aromática, realzada con aceite de oliva virgen extra. El caldo de verduras se incorpora poco a poco, impregnando cada grano con un sabor vegetal profundo y natural. Sobre esta base, se dispone una mezcla generosa y colorida de verduras: alcachofas tiernas, zanahoria en rodajas, brócoli y coliflor al dente, judía verde crujiente, calabacín, berenjena y champiñones que aportan textura y contraste. El resultado es un plato vibrante, de apariencia alegre y llena de vida, que celebra lo vegetal desde una mirada honesta y luminosa, invitando a disfrutar sin prisas.
