Grano a grano, el arroz bomba absorbe lentamente los jugos intensos del sofrito de pimiento verde y rojo, cocinado en aceite de oliva virgen extra hasta alcanzar una textura melosa y envolvente. El caldo de marisco aporta profundidad marina, mientras gambas peladas, mejillones, langostinos y calamares se integran como joyas del mar, cada uno con su textura firme y sabor característico. El resultado es una paella aromática y colorida, que evoca el Mediterráneo en cada cucharada: un plato lleno de matices, calidez y tradición, presentado con un equilibrio visual que despierta el apetito a primera vista.
